
Los jóvenes inmigrantes exigen soluciones reales y no promesas
STAMFORD.- El presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, firmó la prórroga presupuestaria que dota de fondos al Gobierno que permitió así la reapertura de la Administración después de un cierre parcial que duró 69 horas.
Pese a que el líder de la minoría demócrata en el Senado, Chuck Schumer (D-Nueva York), declaró este lunes que la reapertura del Gobierno abre una vía hacia la protección de los dreamers en tres semanas, los defensores de los inmigrantes señalaron que Trump sólo escucha las voces de los asesores de “línea dura” y el Congreso, pero no tiene ninguna “hoja de ruta” clara para resolver el futuro de los jóvenes inmigrantes después de la cancelación de la Deferred Action for Childhood Arrivals (DACA).
Según los defensores, los demócratas cedieron a las presiones de los conservadores y, a cambio de las promesas de que el Congreso votará una legislación que proteja a los dreamers, apoyaron una medida de gastos temporales para reabrir el Gobierno hasta el próximo 8 de febrero.
El acuerdo incluye una promesa del líder republicano de la mayoría, Mitch McConnell, para discutir el Dream Act antes del 8 de febrero.
Para los miembros de la organización CT Students for a Dream (C4D) la decisión del Congreso es indignante, ya que retrasar la solución para los jóvenes soñadores y significa que más dreamers serán deportados.
Lucas Codognolla, director ejecutivo de C4D y receptor de DACA, declaró a EL SOL News que “el Congreso dio una patada a la lata nuevamente. Ambos lados del pasillo continúan reteniendo a los jóvenes inmigrantes de rehenes al no aprobar el Dream Act, a pesar de que el 85 por ciento de los estadounidenses apoya la protección permanente para los jóvenes inmigrantes”
“Estamos indignados porque nuestros miembros, nuestros amigos y los miembros de nuestra familia corren un mayor peligro debido a la cobardía de los senadores estadounidenses. Los demócratas se negaron a mantener la línea y, como resultado, 122 jóvenes inmigrantes al día perderán sus protecciones de DACA, y junto con ello, sus autorizaciones de trabajo, trabajos, seguridad, tranquilidad y capacidad de apoyo para mantener a sus familias”.
Codognolla agregó que “como resultado de las negociaciones de esta semana, todo lo que tenemos es una promesa de discutir el Dream Act antes del 8 de febrero. Esto es inaceptable. Las promesas no nos protegerán de la deportación. Exigimos soluciones. Seguiremos luchando por el Dream Act porque nuestras vidas y el centro moral de este país están en juego”.
Posibles escenarios
Son varios los posibles escenarios que enfrentan los beneficiarios de la Acción Diferida, quienes por el momento cuentan con protección migratoria luego de que un juez federal decidiera reponer el beneficio migratorio se produce un fallo de la Corte Suprema o se llega una solución legislativa del Dream Act.
El primer escenario que puede presentarse es que si el Congreso no llega a un acuerdo y la Corte Suprema decide que Donald Trump debe mantener vigente a DACA, sería favorable para los cerca de 800 mil dreamers, quienes aún esperan una solución permanente a su situación migratoria.
Otro escenario sería que el Congreso llegue a un acuerdo parcial dándole a los dreamers el mismo estatus de DACA renovable cada dos o tres años a cambio de las exigencias de Trump: dinero para el muro, dinero para más agentes y fin de la lotería de visas.
Para los expertos, este escenario es poco probable debido a la oposición de un grupo importante de congresistas demócratas, aunque esta posibilidad cuenta con el respaldo de muchos republicanos que no ven con buenos ojos una solución permanente para los dreamers, sino una salida intermedia sin residencia ni ciudadanía.
El tercer escenario que podría presentarse es que el Congreso no llegue a un acuerdo y la Corte Suprema permita que Trump elimine definitivamente DACA. Esto significa que los cerca de 800 mil dreamers beneficiados por la acción ejecutiva de Obama se expongan a la deportación y sería la más perjudicial para los jóvenes inmigrantes.
Un cuarto escenario sería que el Congreso llegue a un acuerdo que incluya un Dream Act, pero acompañado de pactos paralelos que incluyen más seguridad fronteriza y el muro en la frontera con México y la eliminación de la lotería de visas, entre otras cosas.
Los republicanos han propuesto una idea que daría a los dreamers una protección permanente que les da una vía a la ciudadanía, pero no incluye la llamada “migración en cadena”, es decir, los dreamers jamás podrán solicitar una solución permanente para sus padres, una propuesta demócrata que ha sido llevada a la mesa de discusiones.
Y el último escenario sería que el Congreso no llegue a un acuerdo y los demócratas intenten pasar un Dream Act limpio que solo incluya protección a los dreamers.
De acuerdo con los expertos, esta opción se desprende del compromiso dado a conocer este lunes por McConnell, quien aseguró que si el Congreso no llega a un acuerdo antes del 8 de febrero, cuando vence este pacto temporal para financiar al Gobierno, entonces el Congreso se compromete a legislar solo sobre los dreamers, sin incluir ningún otro tema migratorio.