
NUEVA YORK.- Grupos de salud pública y seguridad de los trabajadores enviaron una carta abierta a los gobernadores de los Estados Unidos, exigiendo que pongan fin a la exclusión de los inmigrantes, trabajadores y familias indocumentados de la asistencia por la pandemia del COVID-19.
En la ciudad de Nueva York, una delegación entregó la carta, firmada por más de 100 representantes de organizaciones de salud pública, seguridad en el lugar de trabajo y defensa de los inmigrantes, en las Oficinas del gobernador Andrew Cuomo, en 633 3rd Avenue, Nueva York.
En la iniciativa participaron miembros de la National Council for Occupational Safety & Health (National COSH); New York Committee for Occupational Safety and Health (NYCOSH), Occupational Safety and Health Committee of the APHA, David Michaels, ex subsecretario de trabajo de OSHA (2009-2017) y representante del grupo de trabajo de trabajadores-formadores de la National Day Laborer Organizing Network (NDLON), entre otros.

LO QUE DICE TEXTUALMENTE PARTE DE LA CARTA
PARA EL GOBERNADOR ANDREW CUOMO
“Las personas y organizaciones abajo firmantes, a partir de nuestro trabajo y experiencia en los sectores del público salud y seguridad y salud en el trabajo, solicitamos respetuosamente que ponga fin a la ilógica exclusión de la población indocumentada de su respuesta a la pandemia, y que tome medidas inmediatas para asegurar que todos los trabajadores migratorios y sus familias reciban el apoyo necesario que este momento demandas.
Representamos muchos años – décadas – de trabajo, experiencia y conocimiento, desarrollando nuestra presencia y relaciones con las comunidades y regiones tan diversas como la población inmigrante a escala nacional. Es por este trabajo y compromiso que sus gobiernos nos han confiado con la implementación de programas gubernamentales en salud pública y derechos laborales. Somos los
instructores de salud y seguridad, médicos, promotores de salud pública y clínicas de salud comunitarias con el que siempre ha contado.
Desde la perspectiva de la salud pública, una respuesta eficaz a la pandemia de coronavirus requiere un nivel muy fundamental:
- La inclusión de toda la población, independientemente de su estatus migratorio.
- El reconocimiento del papel central de los centros de trabajadores y los grupos locales de base (sociedad civil) para asegurar el acceso de comunidades marginadas.
Ya existía una crisis de vulnerabilidad para varios sectores laborales en los Estados Unidos y la pandemia ha agudizado esta vulnerabilidad. Los trabajadores continúan enfermándose y continúan muriendo de COVID-19, con un impacto mayor y desproporcionado en los latinos y afroamericanos, una tasa muy alta en comparación con la población en su conjunto.
Las políticas que excluyen a los indocumentados y a la población inmigrante del apoyo federal y estatal solo agrava la crisis, provocando una mayor pérdida de vidas y sufrimiento. Además, el impacto en la salud mental de esta crisis y de esta exclusión rara vez se discute, pero tiene un impacto no menos palpable en la vida de las personas.
Por tal razón pedimos:
- Incluir a toda la población independientemente del estado migratorio en el apoyo financiero en caso de emergencia, como medida necesaria de salud pública.
- Reconocer e incluir centros de jornaleros y otras organizaciones locales dentro de la infraestructura de respuesta a las emergencias.