WASHINGTON DC.- Meg Norris estaba de viaje por Argentina en abril cuando la atacaron los primeros signos de dengue. El clima en Salta, justo al sur de la frontera con Bolivia, era cálido, pero Norris, una mujer de 33 años de Boulder, Colorado, se puso una sudadera de lana alrededor del cuerpo para evitar temblar.
“Pensé que era intoxicación solar”, dijo.
Esa noche se despertó sudando y pasó las horas alternativamente quemándose y congelándose. Por la mañana, le dolían los ojos y tenía los ganglios linfáticos inflamados.
Durante la semana siguiente, no había nada que hacer más que dormir, mantenerse hidratada y esperar a que pasaran los dolores corporales que le dan a la enfermedad el apodo de “fiebre rompehuesos”.
América Latina está experimentando el peor brote de dengue registrado.
El número de casos en los primeros cuatro meses y medio de 2024 ya es un 238% más alto que en esta misma época el año pasado, que a su vez terminó con un récord de 4.1 millones de casos, según la Organización Panamericana de la Salud.
Los casos son más de un 400% más altos que el promedio de cinco años.
Una temporada de verano inusualmente húmeda y cálida provocada por el patrón climático de El Niño ha creado las condiciones ideales para que los mosquitos que transmiten el dengue nazcan en masa y transporten mayores cantidades del virus.
Los expertos advierten que esto podría ser un anticipo de cómo será el dengue en el futuro. El cambio climático está creando condiciones inusualmente cálidas, que ya están ampliando la gama de enfermedades transmitidas por mosquitos.
“Esto es preocupante para lugares donde el dengue no ha ocurrido antes en la historia reciente: América del Norte y Europa”, dijo el Dr. Albert Ko, profesor de epidemiología de enfermedades microbianas en la Escuela de Salud Pública de Yale.
El dengue es una fiebre viral causada por cuatro virus diferentes y que se transmite a través de las picaduras de mosquitos.
Es común en muchas regiones tropicales del mundo, pero ha comenzado a aparecer en climas más templados.
Los mosquitos que transmiten la fiebre del dengue, Aedes aegypti, ahora se encuentran regularmente en el sur de Estados Unidos, pero recientemente, los insectos se han encontrado tan al norte como el Área de la Bahía y Washington, D.C.
Un estudio de 2019 predijo que 2 mil millones de personas adicionales estarán en riesgo de contraer dengue para 2080.
“Definitivamente estamos preocupados”, dijo Ko.
Cómo se afianzaría el dengue en Estados Unidos
El hecho de que los mosquitos Aedes aegypti se encuentren en lugares fuera de su área de distribución normal no significa que sean portadores del virus del dengue, pero esos primeros insectos son una advertencia de lo que podría estar por venir, añadió Ko.
Las infecciones por dengue transmitidas localmente (lo que significa que la persona infectada no se enfermó en el extranjero) siguen siendo raras en los Estados Unidos continental, pero recientemente se han observado por primera vez en algunos estados.
En octubre pasado, los funcionarios de salud de California informaron del primer caso de dengue de transmisión local en Pasadena.
También se ha producido transmisión local en Arizona, Florida y la costa sur de Texas. El verano pasado trajo olas de calor sin precedentes a Europa, donde se observaron casos de transmisión local del dengue en Francia, Italia y España.
“Creo que esto significa que el dengue será más común”, dijo Paz-Bailey, añadiendo que la principal preocupación sigue siendo el aumento significativo de casos en los que el virus ya es endémico.
Este verano, no se espera ver brotes significativos de dengue en el territorio continental de Estados Unidos, pero dijo que es probable que algunas personas viajen a regiones que tienen más casos de lo habitual y traigan el virus a casa.
“Los casos asociados a viajes dan lugar a pequeñas cadenas de brotes”, afirmó Paz-Bailey.
Los seres humanos son reservorios del dengue, por lo que para que haya una transmisión generalizada, es necesario que haya suficientes personas infectadas por el mosquito.
“Es por eso que estamos viendo un brote de dengue en Puerto Rico en este momento”, dijo Michael von Fricken, director del Centro de Excelencia One Health de la Universidad de Florida en Gainesville.
“Han llegado a este punto de inflexión en el que hay suficientes humanos infectados como para infectar posteriormente a otros mosquitos que continúan transmitiendo enfermedades”.
Florida ha registrado 176 casos de dengue en lo que va del año, la gran mayoría en personas que fueron infectadas en otros países, con mayor frecuencia Brasil o Cuba.
El Departamento de Salud de Florida ha registrado sólo siete casos de transmisión local del dengue en el estado en lo que va del año. En todo 2023, el departamento documentó 173 casos transmitidos localmente, la mayoría de ellos en el condado de Miami-Dade. (Tomado de NBC News).
