NORWALK.- Las escuelas de todo el país están lidiando con la escasez de maestros y Connecticut no es una excepción.
Los distritos están haciendo todo lo posible para incorporar personal nuevo a tiempo para el comienzo del año escolar.
Aquellos en educación dicen que este es un problema que se ha estado gestando desde mucho antes de 2020. Dicen que la pandemia exacerbó el problema y que es un obstáculo que requerirá soluciones a corto y largo plazo.
“Necesitamos tener los recursos que necesitan los maestros y debemos pagar salarios que sean competitivos con trabajos comparables”, expresó el director ejecutivo de la Asociación de Educación de Connecticut, Donald Williams.
Con solo unas semanas para que las escuelas de todo el país comiencen a abrir sus puertas para un nuevo año, la lucha por encontrar personal continúa.
Williams dijo que algunos distritos han visto hasta el 20% de sus maestros irse y que es fundamental elevar la profesión docente.
“Este año en la legislatura, trabajamos arduamente para tener 30 minutos de almuerzo ininterrumpido para los maestros. Así que es una batalla constante por el estatus profesional en un momento en que los maestros tienen cada vez más responsabilidades y estrés”, agregó el directivo.
“Hemos logrado tener casi todo el personal y esperamos tener todo el personal para finales de agosto”, comentó el superintendente de las escuelas públicas de Tolland, Walter Willett.
En las escuelas públicas de Tolland, Willett dijo que se han enfocado en agregar recursos para apoyar al personal y a los estudiantes.
“Estamos trabajando arduamente para centrarnos en el bienestar del personal, tanto mental como físico, y para realizar un reclutamiento activo y brindar apoyo al personal para asegurarnos de que las personas se sientan respaldadas profesionalmente”, precisó el directivo.
La Asociación de Superintendentes de Escuelas Públicas de Connecticut dijo que la escasez de maestros es un problema importante en el Estado y afecta a algunos distritos escolares más que a otros.
Los puestos que son más difíciles de cubrir son los de educación especial, matemáticas, ciencias, bilingües y psicólogos escolares.
El Estado ha flexibilizado algunas regulaciones para facilitar la entrada de maestros al salón de clases, como permitir que los educadores de varios estados con certificados activos y válidos presenten solicitudes y obtengan una certificación equivalente de Connecticut más rápido.
“Tenemos que invertir en nuestras escuelas públicas. Invertir en nuestros educadores y maestros, para que nosotros hagamos esa inversión en nuestros estudiantes”, aseguró Williams.
Si bien la pandemia ha hecho que muchas personas evalúen sus carreras, el superintendente de Tolland dijo que la pasión por la enseñanza también ha llevado a las personas a la educación.
La escasez de personal no es el único obstáculo a medida que se acerca el nuevo año escolar. Las empresas se esfuerzan por contratar y capacitar a los conductores de autobuses escolares para asegurarse de que todas las rutas estén cubiertas.