HARTFORD.- Connecticut tomó medidas para preservar el acceso a los servicios de aborto legal el martes pasado, cuando el gobernador Ned Lamont promulgó una ley que protege a los pacientes y a los médicos de las acciones legales por parte de los estados donde el aborto pronto podría ser ilegal.
Lamont firmó la ley flanqueado (rodeado) por legisladores y defensores de los derechos reproductivos durante un evento ceremonial frente al edificio del Capitolio estatal, el martes pasado por la mañana.
El proyecto de ley, aprobado por la legislatura a fines del mes pasado, se produce cuando la Corte Suprema de los Estados Unidos parece segura de anular la Roe vs Wade, la decisión que legalizó el aborto en todo el país desde 1973.
El cambio dejaría a los estados libres para promulgar políticas que prohíban el aborto.
La legislación busca evitar que los estados con políticas que prohíben los abortos extraditen a las pacientes que eligieron someterse al procedimiento en Connecticut o a los médicos que brindan el procedimiento aquí en el Estado.
Lamont calificó de “impactante” un borrador de opinión ampliamente difundido que indicaba la voluntad de la Corte de desmantelar la histórica decisión.
“Si intentan perseguir a nuestros médicos, perseguir a las mujeres que vienen a este Estado o a las mujeres que viven en Connecticut , eso no va a suceder aquí. Las vamos a proteger”, comentó Lamont mientras firmaba la nueva ley.
La representante Jillian Gilchrest, D-West Hartford, comentó que “este es un momento oscuro para nuestro país y me alegra que Connecticut pueda ser una luz. El acceso al aborto protege nuestra autonomía corporal y el acceso al aborto respeta nuestra decisión de elegir si quedar embarazada o cuándo”.
El proyecto de ley fue aprobado en la legislatura en gran parte por los votos demócratas, pero no fue un asunto estrictamente partidista. Catorce demócratas de la Cámara votaron en oposición y siete republicanos votaron a favor.
En el Senado, tres senadores demócratas votaron en contra y cinco senadores republicanos la apoyaron. Uno de esos republicanos, la senadora Heather Somers de Groton, estuvo entre los asistentes al evento de firma de la nueva ley, el martes pasado.
Aun así, el tema de preservar el derecho al aborto ha dado energía a los demócratas estatales y ha sido un factor importante en la convención de nominación del partido durante el fin de semana.
Mientras tanto, se espera que el Senado de los Estados Unidos vote esta semana sobre un proyecto de ley presentado por el senador federal Richard Blumenthal, demócrata de Connecticut, para codificar la Roe vs Wade.
No se espera que elimine el umbral de obstruccionismo de 60 votos del Senado.
En el evento del martes pasado, el hijo de Blumenthal, el representante Matt Blumenthal, demócrata de Stamford, dijo que la ley aprobada recientemente en Connecticut era la más fuerte de su tipo en la nación.
Blumenthal, quien junto con Gilchrest preside el Caucus de Derechos Reproductivos de la legislatura estatal, dijo que la ley protegería a los residentes de Connecticut de un “ataque interestatal”.
Señaló en particular las políticas de aborto restrictivas ya aprobadas en Texas.
“Esta ley les dice a las personas de todo el país esencialmente, Texas, no se metan con Connecticut”, dijo Blumenthal.
El gobernador fijó su mirada un poco más localmente. Sin nombrar al candidato republicano a gobernador Bob Stefanowski, Lamont le pidió que describiera sus posiciones sobre el derecho al aborto.
